Cookie usage policy

The website of the University Carlos III of Madrid use its own cookies and third-party cookies to improve our services by analyzing their browsing habits. By continuing navigation, we understand that it accepts our cookie policy. "Usage rules"

Laudatio Manuel Bermejo

Excelentísimo Sr. Rector Magnífico de la Universidad Carlos III de Madrid, Excelentísimas e Ilustrísimas autoridades políticas y académicas, admirado profesor PIo Caroni, estimados miembros de la comunidad universitaria, señoras y señores. Es de justicia dar inicio a mis palabras con la expresión de mi profundo agradecimiento al Sr. Rector de la Universidad Carlos III por el honor que me ha concedido al encargarme esta laudatio y ofrecerme, además, este privilegio en una ocasión tan señalada como lo es la conmemoración del tercer centenario del nacimiento del rey Carlos III, que da nombre y lustre a esta Universidad. Agradecimiento que hago extensivo al Departamento de Derecho Penal, Derecho Procesal e Historia del Derecho, que ha respaldado unánimemente la propuesta de concesión del doctorado honoris causa al profesor Pio Caroni, así como al Consejo de Gobierno de la Universidad, que ha rubricado esta iniciativa mediante el acuerdo favorable a su nombramiento. En esta manifestación de gratitud quiero dirigirme también al propio profesor Pio Caroni, a quien en virtud de tan generosa designación me ha correspondido presentar con motivo de la concesión de esta distinción, la más alta a la que en el ámbito académico se puede aspirar, precisamente por haber aceptado participar en este elogio solemne, siendo persona que por su naturaleza, probablemente influida por la impronta de austeridad y escaso apego a la vanidad que imprime su nacionalidad, es poco proclive a recibirlos, y que, por ello, no exhibe otros honores de los que antes se le ha considerado merecedor. No me extenderé, por ello, demasiado en el relato de su itinerario académico, que, tras realizar estudios secundarios en su ciudad natal, Bellinzona, capital del Ticino suizo, se inició en la Universidad de Berna, donde en 1962 concluyó su licenciatura en derecho, para continuar después su formación como investigador en Friburgo, Milán y Hamburgo, bajo el magisterio de personalidades tan relevantes para la historia del derecho como Thieme, Vismara o Kaser. De regreso, ya como asistente de cátedra, a la Universidad de Berna, donde ha permanecido durante toda su vida académica, y de la que hoy es profesor emérito, obtuvo en 1971 la cátedra de historia del derecho y derecho privado suizo, convirtiéndose, desde entonces en una figura de referencia en su prestigiosa Facultad de Derecho, de la que fue Decano, y en la propia Universidad, cuyo Rectorado ocupó durante cuatro años, entre 1987 y 1990 1 . Autor de una quincena de monografías esenciales, varias de ellas traducidas a diversos idiomas, y de una extensísima relación de publicaciones, Pio Caroni ha sido calificado como una de las más relevantes e influyentes figuras mundiales de la historia del derecho. Importancia que se hace visible por su participación en la fundación y dirección de la reputada Zeitschrift für Neuere Rechtsgeschichte, y en su pertenencia a los consejos científicos de varias de las principales revistas científicas sobre la materia existentes en Europa, así como en su condición de miembro durante varios años de la dirección de la Academia Suiza de Ciencias Humanas y Sociales y su vinculación como consejero al más destacado centro de investigación existente en nuestra disciplina, el Max Planck Institut für Europäische Rechtsgeschichte de Frankfurt. Poco inclinado, como he señalado, a la aceptación de galardones personales, sin embargo, ha recibido varios de extraordinario significado, entre los que merecen mención los dos premios obtenidos en Italia, en 1998 y 2009, al mejor libro jurídico del año y, la concesión, en 2009, del Premio Internacional Galileo Galilei del Rotary Club Italiano, otorgado anualmente, y bajo el patrocinio de la Presidencia de la República, en distintos campos, incluido el jurídico, a una personalidad extranjera en reconocimiento a su excepcional impacto en la cultura italiana. Testimonio, además, irrefutable de la dimensión que cobran su obra y su figura lo es el amplio elenco de universidades de distintos países que han querido beneficiarse de su excelencia docente y de su profunda sabiduría, recibiéndole como profesor visitante 2 o invitándole a compartir su conocimiento y su experiencia en todo tipo de seminarios y conferencias. 1 De su tiempo como Rector cabe extraer una anécdota que define su personalidad. Terminada un día de verano la jornada de trabajo y de camino a su casa recibió la invitación por parte de un grupo de estudiantes extranjeros, principalmente españoles, para unirse al partido de futbol que iniciaban en la pradera situada frente al Rectorado, a lo que accedió con gusto. Tras el partido y ante la petición de los estudiantes para poder contar con él en otras ocasiones, les indicó que podían llamarle en la ventana de su oficina situada en la planta baja del edificio. Y así lo hicieron durante varios meses, ignorando que quien jugaba con ellos era el Rector. 2 La lista es larga. Sólo en España ha sido profesor visitante en las Universidades de Salamanca, Barcelona y Carlos III de Madrid. Tras su apariencia verdiana, al igual que el gran genio italiano de la ópera, Pio Caroni es un coloso de la historia del derecho que, en una disciplina demasiado tendente a replegarse tras las fronteras nacionales, irradia la poderosa luz de su abrumadora autoridad científica en espacios culturales tan destacados como las áreas germanófona y francófona, la europea mediterránea e Iberoamérica. Es decir, en todos aquellos países donde imperan sistemas jurídicos en los que ha dejado sentir su peso el fenómeno de la codificación, el terreno donde con más intensidad y hondura ha volcado su penetrante e iluminadora capacidad de análisis e interpretación 3 . Y lo hace, precisamente, por ser un historiador atípico, que ha sabido evitar las rutinas de la dedicación a una cómoda retrospección en el pasado jurídico dedicada a exhumar con tono neutro y descriptivo normas e instituciones desvestidas de toda connotación política o social que pueda resultar controvertida. Al contrario, Pio Caroni nos ha enseñado a trascender la mera dimensión arqueológica y erudita del quehacer del historiador del derecho, rescatando la función primordial que está llamado a desempeñar como desvelador de las claves de comprensión de los distintos sistemas jurídicos, poniendo, con ello, de relieve lo esencial que puede ser su contribución a la reflexión del jurista acerca de su objeto de estudio, ya detenga su mirada sobre el derecho pretérito o sobre el actualmente vigente. Pio Caroni, es maestro y ejemplo del compromiso, del inconformismo y de la coherencia a la hora de adoptar un enfoque investigador que huye de toda visión retórica, aristocrática y abstracta de la historia del derecho. Su interés no reside en la simple recuperación de fuentes perdidas u olvidadas o en la construcción de dogmas, sino que siempre ha estado dispuesto a explorar vías inhóspitas e impredecibles con el arriesgado afán de penetrar en la entraña más íntima, el trasfondo social y político, que late tras los fenómenos jurídicos. Y por eso, sus posicionamientos nunca dejan indiferente. 3 Por citar algunas obras capitales en este terreno: “Privatrecht”: Eine sozialhistorische Einführung, Basilea-Frankfurt am Main, Helbing & Lichtenhahn, 1986. Lecciones catalanas sobre historia de la codificación, Barcelona, Marcial Pons, 1996. Einleitungstitel des Zivilgesetzbuches, Basilea Frankfurt am Main, Helbing & Lichtenhahn, 1996. Saggi sulla storia della codificazione, Milán, Giuffrè, 1998 (Escritos sobre la codificación, Madrid, Dykinson, 2012). Gesezt und Gesetzbuch. Beiträge zu einer Kodifikationsgeschichte. Basilea-Münich, 2003. Lecciones de historia de la codificación, Madrid, Dykinson-Universidad Carlos III, 2013. Desde la soledad que cultiva para el estudio y la creación en sus retiros a su amada tierra ticinesa 4 , Pio Caroni ha sido capaz de transformar, con su aguda perspicacia y su finísimo sentido crítico, nuestra visión de cuestiones fundamentales para el entendimiento de nuestro ordenamiento jurídico. Sobre todo, en el terreno del trascendental proceso de codificación emprendido desde el siglo XVIII en diversos países europeos y desarrollado a lo largo de la centuria siguiente como uno de los elementos definidores nucleares del llamado Estado liberal de Derecho, del que somos directos herederos. Un campo en el que se le reconoce como la indiscutible máxima referencia mundial y que le pone en conexión con el reformismo ilustrado del que tan importante exponente fue el rey Carlos III, a quien hoy también con su presencia conmemoramos. Pues, en realidad, Pio Caroni es también un adalid de la ilustración, un ambicioso reformador, que con su clarividencia ilumina el camino de quienes aspiramos a seguir la senda que con su ejemplo nos ha trazado. Aquellos que en esta universidad nos dedicamos a este campo disciplinar, cuya justificación y trascendencia el profesor Caroni tanto ha contribuido a revalorizar, nos sentimos, por ello especialmente afortunados. Pues su colaboración durante más de un lustro en la docencia de una asignatura de nuestros másteres de investigación nos permite, con el máximo orgullo, hablar de él como un miembro más de esta comunidad universitaria. Un período enormemente fructífero en el que, junto a sus reseñadas excelencias científicas y su incomparable capacidad de comunicación como enseñante, de la que tanto hemos aprendido, también hemos tenido la suerte de poder apreciar el extenso catálogo de excepcionales cualidades como la cercanía, la humildad, la generosidad, que adornan su personalidad de una insólita y admirable bonhomía. Pero sin olvidar una absoluta dedicación, una inagotable curiosidad y una marmórea vocación de trabajo, que hacen que todavía, en lugar de abandonarse a los placeres del retiro, nos siga regalando obras de tamaña magnitud y profundidad, que de inmediato se convierten en referencias inexcusables 5 . 4 Die Einsankeit des Rechtshistorikers. Notizen zu einem problematischen Lehrfacht, Basilea-Munich, Helbing & Lichtenhahn, 2005. Obra que ha sido traducida al italiano, Milán, Giuffrè, 2009, y al castellano: La soledad del historiador del derecho. Apuntes sobre la conveniencia de una disciplina diferente, Madrid Dikynson-Universidad Carlos III, 2010. El profesor Pio Caroni acumula, en definitiva, un extraordinario caudal de méritos como académico y como investigador, que aquí he tratado de glosar, y que hace que, en mi opinión, todos debamos felicitarnos por su solemne incorporación a nuestro claustro de doctores, agregando el brillo que su figura aporta a nuestra Universidad al de todos aquellos que le han precedido en esta honorífica distinción. Permítanme, sin embargo, concluir, con un sentido recuerdo a la desaparecida profesora Adela Mora, que tanto habría disfrutado de este momento. Muchas gracias.