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Imagen Retos estratégicos

La universidad debe afrontar en los próximos años varios desafíos especialmente relevantes que requieren el despliegue de planes específicos de actuación para llevarlos a cabo:

Garantizar la continuidad del conocimiento y la experiencia dentro de la organización potenciando la atracción y retención del talento.

Es necesario fortalecer los mecanismos y las asignaciones presupuestarias que favorezcan la atracción y la retención de talento, que permitan al personal construir trayectorias profesionales sólidas y duraderas, al tiempo que se incentivan y recompensan sus logros académicos y profesionales. Es fundamental reforzar actuaciones que mitiguen el envejecimiento de las plantillas.

Maximizar el uso ético de la inteligencia artificial en todos los ámbitos de la institución (docencia, investigación y gestión), impulsando al mismo tiempo una transformación digital integral.

Para afrontar este enorme desafío, es preciso transformar de manera significativa la organización, flexibilizar la gestión de personal y favorecer tanto la atracción de talento especializado como la retención de personal altamente cualificado. Asimismo, será indispensable adaptar las metodologías docentes e investigadoras a las nuevas realidades tecnológicas.

Desarrollar un modelo propio de formación permanente innovador, flexible y personalizado que posibilite la ampliación y mejora de estos programas, e integre las microcredenciales en el actual marco de desarrollo profesional continuo

La acelerada evolución del conocimiento y la tecnología exige una actualización constante de competencias, ya sea mediante la recertificación o la adquisición de nuevas habilidades. La formación a lo largo de la vida, integrada de forma central en las políticas europeas de educación superior, se ha convertido en un pilar fundamental para cualquier universidad de vanguardia. En este contexto, la universidad debe asumir un rol proactivo e implantar un modelo de gestión de la formación permanente que permita abordar estos retos de manera eficaz, mediante el estableciendo de alianzas estratégicas con asociaciones claves, reevaluando la actual estructura organizativa y de gestión de estos programas.

Establecer una actuación integral diferenciada en Ciencias de la Salud y avanzar en su implantación progresiva.

La universidad definirá una planificación plurianual que contemple la creación e implantación de nuevas titulaciones; el desarrollo de una agenda de investigación propia, la atracción de nuevo profesorado, el aprovechamiento de sinergias con la investigación realizada  ya existente, el establecimiento de alianzas con agentes externos relevantes (hospitales, empresas y administraciones) y la dotación de los recursos financieros necesarios en coherencia con el contexto global de la universidad.